Cogito 3

Johannes leyó los datos de la pantalla. Los días antes a sus desapariciones, los tres científicos habían tenido una especie de demencia senil. Todos ellos empezaron poco a poco en los meses anteriores a tener pérdidas de memoria, fallos de pronunciación....

A Johannes le pareció algo extraño, necesitaba saber en qué estaban trabajando esos científicos antes de sus desapariciones, ya que, si estaban probando algún tipo de droga, de alguna forma podría haberles afectado y entonces el caso ya no le competería a él.

Tras un par de llamadas, confirmó que ninguno de los científicos trabajaba con agentes químicos, con lo cual podía descartarse la contaminación en el trabajo, sin embargo Johannes no descartó su idea inicial de la intoxicación por alguna droga. Si alguien quería hacer desaparecer a los científicos, lo mejor era drogarlos, secuestrarlos y matarlos. Pero ¿por qué alargar la espera o usar una droga tan a largo plazo? Fuera como fuese había que investigar las drogas nuevas derivadas de la química alienígena.

Johannes pidió un permiso de investigación aportando su hipótesis y el aliciente de investigar estas nuevas drogas para un futuro. El permiso le fue concedido a las pocas horas tras lo cual bajó al laboratorio para informar los científicos y pedir un cambio de cuerpo para no ser reconocido en las zonas donde se establecía el mercado negro.

Tras varias horas en la maquina, Johannes con nuevo look, tuvo que rellenar los registros con su nuevo aspecto para que pudiese volver al cambio de cuerpo y acceder a su despacho. Al acabar el papeleo, pudo retirarse a su casa a esperar a la noche para salir a comprar varias de esas nuevas drogas.

Lo bueno de vivir solo es que nadie iba a asustarse de que un desconocido entrase en casa y el no tener que dar explicaciones sobre el cambio y las largas salidas nocturnas.

Al caer la luz natural, Johannes se encaminó hacia los barrios bajos. El problema de estos a parte de la delincuencia era el no tener ningún transporte directo, así que la única forma de llegar hasta allí era caminando unas cuantas horas.

Durante su paseo, pudo notar el cambio gradual que sufría la ciudad según se acercaba a la zona más marginal de la gran ciudad. Los edificios cada vez estaban en peor estado y la iluminación nocturna dejaba mucho que desear. Comparado con el centro, esas zonas parecían haber sufrido una guerra o un abandono casi total.


Al llegar, Johannes analizó la zona en busca de algún vendedor o por lo menos de alguien que supiese donde comprar algo. El problema es que para acceder a un vendedor tenías que ir con algún conocido suyo y para Johannes eso era un problema.